Juego: Pocket War
Temática: Guerra
Hispano Filipina
Escala: 28mm
Fecha: 28/12/2017
Jugadores:
Ejército Español: Roger,
Burt Minorrot
Ejército Papango: Hino,
Strategus Maximus
Lugar: Tienda Kekolandia
Miniatures
Después de navidad, y antes de fin de año, en Kekolandia
Miniatures se realizó por parte de miembros de VIIII Legion, una demo de Pocket
War, a uno de los propietarios de Kekolandia Miniatures.
En esta ocasión se realizó una escaramuza con miniaturas de
las guerras Hispano-Filipinas de la marca 1898.
Los capitanes de ambos equipos, Roger por parte de los
Españoles y Strategus por parte de los Papangos.
Las fuerzas españolas se acercan a la zona rural en patrulla.
Mientras que los papangos se acercar en cuadrilla.
Los papangos inician el acercamiento a la granja rural de
una forma abierta, iniciando el avance de algunos rebeldes por los sembrados de nuestro flanco izquierdo.
La patrulla española asegura la granja principal e inician
las maniobras para que no les cojan por los flancos.
Los papangos intentan flanquear a los españoles,
aprovechando la frondosidad del bosque que teníamos a nuestra derecha.
Mientras su mando y el resto de rebeldes, inician su
acercamiento por la explanada central.
El flanco derecho rápidamente es consolidado por un binomio de
soldados españoles.
El oficial español va distribuyendo sus tropas antes de
proceder al avance final.
Desde la granja, los soldados inician sus disparos hacia los
papangos, sabiendo que tienen la ventaja de la cobertura y protección de la
misma.
Los rebeldes filipinos, a pesar de los disparos españoles, continúan
el avance, en especial desde la cobertura del bosque.
Las tropas papangas del centro, llegan hasta las ruinas
cercanas a la granja.
Y el resto de sus tropas, siguen a los valientes que han
asegurado esa punta de lanza.
Los Papangos del flanco izquierdo se atreven a salir de los
sembrados para intentar asaltar la granja.
El abanderado rebelde, sigue tras las tropas, pero sin poner
en riesgo que el pendón caiga.
Mientras, el estandarte español, sigue en su posición, tal
como le ha ordenado su superior.
Los soldados de la granja, poco a poco van abatiendo a los
filipinos, en especial a los que se acercan por los sembrados del flanco
izquierdo, que son los que más peligro pueden tener.
Ya entrado en combates más cercanos el oficial español, se
encara al líder papango, llegando al duelo “entre caballeros”.
Una vez el peligro del flanco izquierdo es eliminado, los
soldados que estaban fortificados en la granja, inician los disparos para
apoyar a sus compañeros del centro de la batalla.
En el duelo entre mandos, al final el líder rebelde se ha
llevado la peor parte y decide rehuir el combate.
A mitad de la partida, son un par de bajas españolas y
ninguna por parte de los rebeldes, prometía ser una escaramuza rápida.
Pero al final los españoles se han venido para arriba y han
desbaratado todos los intentos de hacerse con la granja.
La derrota y huida de los rebeldes papayos fue el acto final
de la contienda.
También hay que decir que la partida estuvo tan igualada que
si los españoles en ese turno no hacen una baja más, los filipinos tenían a un
español a punto de mira de varios filipinos, y si caía, los que hubiesen huido
habrían sido los españoles.
Muy reñida e igualada. Y, como siempre, muchas risas y gran
ambiente entre los jugadores y espectadores.
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